lunes, 22 de junio de 2009

Castilleja de la Cuesta: Comienza la restauración de "El Colino", segundo manto procesional del siglo XIX (1889) de la Inmaculada Concepción

Hace varias semanas que se encuentra en el taller sevillano de José Ramón Paleteiro el manto conocido como "El colino", pieza procesional de 1889 de la Patrona de Castilleja de la Cuesta, la Inmaculada Concepción.
La Hermandad de la Calle Real ha depositado la confianza en este bordador para restaurar esta joya del siglo XIX que lleva sin procesionar cuarenta y cinco años, y la última vez que exornó a la Señora fue en el Octavario de 1998.

Bordado en oro sobre seda celeste, de autor desconocido aunque por la calidad de las piezas, el estilo y el tipo de bordado los estudiosos lo atribuyen al taller de las Hermanas Antúnez. La obra fue una donación de don José Marín Oliver “El Tío Marín”, un antiguo alcalde de la localidad, como bien especifica la cláusula novena de su testamento, realizado en 1884: “Es mi voluntad, que por mis albaceas se compre un manto a la referida efigie de Nuestra Señora de la Concepción de mi parroquia, invirtiéndose en el hasta la suma de tres mil pesetas, o sean doce mil reales”.

El manto posee una elegante y armoniosa composición simétrica, aunque sus motivos ornamentales son claramente de los años finales de la centuria decimonónica. Está compuesto a base de hojarascas, elementos que simbolizan la “regeneración de las almas”, y de flores tales como girasoles, margaritas, rosas o tulipanes, las cuales hacen referencia a las “virtudes marianas”, teniendo esta pieza la peculiaridad de poseer una paloma engarzada en la cola de la misma, que representa al Espíritu Santo.
Recibe la denominación popular de “Colino”, por ser un manto de pequeñas dimensiones sin sobresalir de las andas procesionales, lo cual es símbolo de “gozo y alegría”. En 1965 el deficiente estado de conservación que presentaba condicionó su sustitución por un manto liso de terciopelo celeste en la procesión del Domingo de Resurrección, el cual se convirtió en 1970 en el actual que desde esa fecha procesiona y que bordó la insigne Esperanza Elena Caro.Esta obra necesita una inminente restauración por su valor histórico-artístico y parece ser que el próximo año se podrá contemplar en todo su esplendor gracias a esta apuesta de la Hermandad por la conservación de su rico y extenso patrimonio artístico, pues junto con el manto procesional de la Virgen de los Dolores de 1903, y los dos de la Patrona, el de 1970 y este de 1889, el cual es desconocido por muchas personas al no estar expuesto en el tesoro de la Hermandad, son tres las maravillas con las que se ataviarán en sus cultos y salidas las dos titulares marianas de la Calle Real.

No hay comentarios: