El pasado 8 de diciembre Castilleja de la Cuesta se desbordó en oraciones, vítores y ovaciones a su Patrona, la milagrosa imagen de la Inmaculada Concepción.
Por la mañana, la Banda de Música de la Cruz Roja recorrió las calles de la población entre alegres marchas militares.
A las doce del mediodía daba comienzo la Solemne Función, y a su terminación se procedió a la Bajada de la Virgen desde el altar al presbiterio, entre un clamor de piropos y vivas a la Patrona de España y Castilleja.
Durante toda la jornada la Inmaculada estuvo en Besamanos, donde cientos de devotos desfilaron ante la bendita imagen.
A las seis y media de la tarde la Banda Municipal de Carrión de los Céspedes recorrió las calles de la Villa para anunciar la Subida de la Patrona al altar mayor.
A las siete de la tarde tuvo lugar la Presentación de los niños a la Virgen, y a las nueve de la noche dio comienzo el acto de la Subida con la Consagración de Castilleja de la Cuesta a la Inmaculada, para continuar con un piadoso fervorín, el recitar de una poesía a cargo del Pregonero de la Inmaculada del presente año, la Salve popular y la triunfal Subida de la Patrona a su camarín, entre marchas de la Banda de Carrión y los aplausos, vivas, piropos, concluyendo con la marcha Real, el repicar de campanas y el estruendo de infinidad de cohetes.
Por la mañana, la Banda de Música de la Cruz Roja recorrió las calles de la población entre alegres marchas militares.
A las doce del mediodía daba comienzo la Solemne Función, y a su terminación se procedió a la Bajada de la Virgen desde el altar al presbiterio, entre un clamor de piropos y vivas a la Patrona de España y Castilleja.
Durante toda la jornada la Inmaculada estuvo en Besamanos, donde cientos de devotos desfilaron ante la bendita imagen.
A las seis y media de la tarde la Banda Municipal de Carrión de los Céspedes recorrió las calles de la Villa para anunciar la Subida de la Patrona al altar mayor.
A las siete de la tarde tuvo lugar la Presentación de los niños a la Virgen, y a las nueve de la noche dio comienzo el acto de la Subida con la Consagración de Castilleja de la Cuesta a la Inmaculada, para continuar con un piadoso fervorín, el recitar de una poesía a cargo del Pregonero de la Inmaculada del presente año, la Salve popular y la triunfal Subida de la Patrona a su camarín, entre marchas de la Banda de Carrión y los aplausos, vivas, piropos, concluyendo con la marcha Real, el repicar de campanas y el estruendo de infinidad de cohetes.
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Información y Fotos: Antonio Rodríguez Navarro
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